Todos los sistemas de protección contra incendios están diseñados para salvar vidas y proteger la propiedad. Pero, dependiendo de su diseño, ciertos sistemas también pueden reducir los costos de mano de obra y materiales.
Históricamente, los contratistas se han basado en el método del Sistema de Tuberías con cédula para el diseño de protección contra incendios. Este sistema requiere que el diseñador conozca la clasificación de riesgos del edificio (riesgo ligero, riesgo ordinario o riesgo extra), la presión del suministro de agua y el espacio entre los rociadores contra incendios. Después, el diseñador utiliza una tabla o "cédula" para elegir el tamaño de la tubería necesario para suministrar los rociadores contra incendios.
Pero este método de diseño está desactualizado y con frecuencia utiliza tamaños de tubería más grandes y costosos de lo que realmente se necesita. También es algo poco confiable porque se basa en un calibre establecido previamente de tamaños de tubería y no hay una forma verificable de saber cómo funcionará el sistema.
Debido a estas variables, la Asociación Nacional de Protección contra Incendios (NFPA, por sus siglas en inglés) introdujo un método de diseño de sistema más preciso y confiable conocido como Cálculo Hidráulico.
¿Qué es el Cálculo Hidráulico?
La NFPA 13 es la norma para la instalación de sistemas de protección contra incendios. Requiere que el diseñador realice un cálculo hidráulico para confirmar que el sistema se mide con precisión para su aplicación particular.
El cálculo hidráulico mide los cambios de presión en función de la fricción interna de la tubería. Utiliza una fórmula específica para calcular el flujo de líquidos a través de un sistema de tuberías y garantiza que se pueda suministrar suficiente agua para controlar con eficacia un incendio en el edificio.
La Fórmula Detrás del Cálculo Hidráulico
La fórmula de Hazen-Williams es la ecuación que se ha utilizado durante mucho tiempo para calcular la pérdida por fricción en los sistemas de tuberías. Determina el tamaño apropiado de la tubería y los rociadores contra incendios para usar en un sistema de protección contra incendios calculando la pérdida de presión real en función de la longitud de la tubería y la fricción interna. Cuanto menor es la fricción, más fácilmente puede fluir el agua, lo que limita la presión y permite tamaños de tubería más pequeños.
En la fórmula de Hazen-Williams anterior, cuanto mayor sea el valor de C (coeficiente de pérdida por fricción para la rugosidad de la pared de la tubería), más estrecho será el diámetro interno de la tubería para alcanzar la velocidad de flujo equivalente.
El Cálculo Hidráulico y la Tubería BlazeMaster® Maximizan la Eficiencia y Minimizan los Costos
El cálculo hidráulico es el método de diseño más preciso y preferido porque funciona para todos los tipos de sistemas y materiales de tuberías. Pero en comparación con materiales como el acero, la combinación de usar el cálculo hidráulico y el CPVC BlazeMaster permite extinguir los incendios con la máxima eficiencia.
El CPVC BlazeMaster tiene un factor C de Hazen-Williams constante de 150, mientras que el acero tiene un factor C inicial de 120 que disminuye con el tiempo debido a su susceptibilidad a la corrosión. Debido a esto, la superficie interior de la tubería de CPVC BlazeMaster es más suave que la mayoría de las tuberías de metal, lo que crea menos fricción para interferir con el flujo de agua. Esto permite que el sistema de tuberías tenga una velocidad de flujo equivalente a través de tuberías más pequeñas y menores, lo que en última instancia produce ahorros en los costos de materiales y mano de obra.
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El cálculo hidráulico ha sido un método de diseño probado y confiable para sistemas de rociadores contra incendios durante décadas. Para obtener más información sobre el diseño del sistema y los sistemas de protección contra incendios BlazeMaster, descargue nuestra Guía de Cálculo Hidráulico.
